Durante la mañana del sábado los alumnos de Semillitas, que desde el mes de julio están entrenando, recibieron una clase técnica del maestro invitado. Allí les explicó los conceptos básicos del deporte y dirigió un entrenamiento ante la atenta mirada de los papás que no paraban de grabar la jornada con sus teléfonos celulares.
Con la humildad que sólo los grandes tienen, "el Cata" como le llaman en el ambiente, demostró también sus habilidades en la cancha haciendo payanitas a lo largo de la cancha y pateando al arco de manera magistral. Luego de la clínica se dirigió a los presentes, padres y chicos, e hizo un raconto de su vida, su pasado, la humildad con la que pasó su infancia, la falta de estudios y cómo esa rudeza fue determinante para su vida.
Haciendo mucho hincapié en que el estudio lo es todo, que sin estudios no se llega a nada, se mostró como el ejemplo viviente de que con perseverancia y esfuerzo todo puede lograrse; que el pasar necesidades no tiene que ser sinónimo de delincuencia, drogas, alcohol. El aplauso de los padres no se hizo esperar y la jornada finalizó con la promesa de un nuevo encuentro pero esta vez midiéndose con las distintas divisiones de la Academia Catita Moreno.