"Gané dinero con hechos ilícitos, pero trascendía lo comercial. Generé una relación de afecto con él que le brindó confianza: le manifestó a los hijos que me iban a incluir", sostuvo al referirse a las maniobras de lavado de dinero iniciadas tras la muerte del ex presidente Néstor Kirchner.
Fariña continuó con la declaración indagatoria iniciada el miércoles de la semana pasada en el juicio oral que se le sigue junto a Lázaro Báez, sus cuatro hijos y otra veintena de procesados por lavado de dinero proveniente de ilícitos con la obra pública en Santa Cruz durante el kirchnerismo.
Al respeto, recordó el episodio -al que ya se refirió en otras ocasiones- en el que la ex presidenta Cristina Kirchner habría reprochado a Lázaro Báez advertida por maniobras para "sacar dólares al exterior" en base a un alerta de la Embajada de Estados Unidos."La señora presidenta lo había increpado a ver si estaba sacando dólares al exterior, le habían advertido de la Embajada de Estados Unidos y él se lo negó", dijo.
Sobre los cuatro hijos de Báez, Luciana, Leandro, Martín y Melina, explicó que según supo hubo una reunión de ellos con su padre donde se habló del inicio de las maniobras para sacar dinero del país y se les anunció que él iba a participar. Fariña sostuvo que le rendía cuenta de las operaciones a "Lázaro, Leandro y Martín" Báez y que cobraba el 5% de cada dólar que se expatriaba o invertía para quedar blanqueado.
Para graficar cómo era su vínculo con el titular de Austral Construcciones, Fariña sostuvo que al morir Néstor Kirchner, le regaló un cuadro con extractos de la canción "Llegaremos a tiempo" de la artista Rosana.Sobre el dinero, dijo que Lázaro Báez aludió a seis millones de dólares y que había efectivo en una chacra, en lockers y en "cajas de champagne" y en "algunas estancias más".
Fuente:Telam