El cadáver de una mujer de 30 años que estaba desaparecida hace un mes fue hallado hoy enterrado en su casa de la localidad bonaerense de Villa Tesei, luego de que su padre le confesara a otro hijo que él le había degollado y sepultado en el patio tras una pelea, informaron hoy fuentes policiales.
La víctima fue identificada como Ariana Yésica Palacios (30), quien estaba desaparecida desde el 28 de agosto y vivía junto a sus padres y una hija de 6 años, en la casa donde fue encontrada asesinada, en la calle Felix Frías 3577 de la mencionada localidad del partido del Hurlingham.
Por el crimen, el padre de la víctima, Willy Palacios (64), de nacionalidad boliviana y quien trabaja en una funeraria porteña, quedó detenido ayer luego de que otro de sus hijos y hermano de la víctima, se presentara ante los investigadores para denunciarlo.
El joven le dijo a la policía que su padre le confesó que el 28 de agosto, alrededor de las 11, había discutido con Ariana cuando estaban a solas en su casa, que forcejearon, que la asesinó provocándole un corte en el cuello y que luego la enterró en el patio de su vivienda sin decirle nada a nadie.
Ante esta denuncia, el fiscal Walter Leguisamo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Morón, ordenó la inmediata aprehensión de Palacios y que agentes de la comisaría 2da. de Villa Tesei preservaran la propiedad para que hoy se realizaran las excavaciones en búsqueda del cadáver.
Policías, bomberos y peritos de Policía Científica fueron convocados hoy a las 11 a esa propiedad para iniciar la búsqueda del cuerpo y tras dos horas de trabajo y luego de que un perro rastreador de cadáveres indicara un sitio, los expertos hallaron el cuerpo, que fue remitido a la morgue para su autopsia.
En la casa donde fue hallado el cadáver vivían Ariana, que había nacido en Argentina; sus padres, ambos inmigrantes de nacionalidad boliviana; y la hija de 6 años que la víctima había tenido con una pareja del pasado.
Ariana trabajaba en un call center de Capital Federal, mientras que su madre lo hacía en el taller de una marca de lencería y el padre, en una funeraria porteña donde hacía servicios para famosos fallecidos, como Ricardo Fort.
Fuente:Telam